Cuando anochece a orillas del Limpopo el sonido de la selva se hace ensordecedor. Miles de animales de diferentes especies alzan su voz hasta que un rugido enmudece a toda la fauna. El leopardo ha salido a cazar, pero él también se convertirá en presa.
Estamos en Sudáfrica para abatir uno de los Cinco Grandes. Este solitario felino se caracteriza por su astucia y por su ataque rápido y letal.
Su rugido enmudece los sonidos de la noche en la selva y acelera el corazón de los cazadores. Al escucharlo todos los animales saben que un gran depredador está al acecho.