Desde hace años, las poblaciones de corzo han crecido de forma espectacular en todo el continente europeo. En la Península Ibérica no es para menos, y la fiebre corcera va en franco aumento. Precisamente, nuestro querido ‘capreolus’ es el protagonista de esta jornada. En tierras cántabras, viviremos un rececho donde el agua y el viento se lo pondrán muy complicado a los cazadores, que deberán emplearse a fondo para abatir un buen ‘duende’.
En esta aventura tras los corzos, Alberto Aníbal, reconocido cazador profesional, nos va a ir descubriendo, a través e diferentes lances, las singularidades que presentan las cuernas de algunos corzos, ya sea por traumatismos o por razones genéticas.
Tres trofeos diferentes para los aficionados a las batidas y a los recechos balcánicos en un entorno de singular belleza y gran atractivo para los cazadores peninsulares
Fuera de la Península Ibérica, Bulgaria es un destino cinegético de lo más atractivo y donde los españoles nos sentimos muy a g...